AMY CARMICHAEL
La Vida de Amy Carmichael de Dohnavur Guillermo y Catalina se casaron cerca del año 1865. Los dos tenían el privilegio de ser hijos de hogares piadosos. Se casaron en la Iglesia Presbiteriana de Irlanda. El fuego del avivamiento en 1859 trajo alientos nuevos del Espíritu Santo a las vidas de ellos. Uno nunca puede ser el mismo después de estar en medio de una visitación del Espíritu Santo. Cuando Dios se manifiesta y se escucha su voz claramente, son como los días en los cielos, estando en la tierra. Miles de almas entraron en el reino de Dios, y los padres de Amy estaban en medio de todo esto. El fuego del avivamiento también trajo vida nueva y libertad a las reuniones formales de la Iglesia Presbiteriana de Irlanda. Igualmente, el nuevo predicador estaba en medio del avivamiento. Todas estas circunstancias fueron ordenadas por Dios, obrando juntos para proveer muchas corrientes de aguas, para que la joven Amy creciera bien en medio de ellos.La familia de Guillermo, y también la de Catalina, se pueden caracterizar por sus generaciones pasadas. Se encuentran señales de piedad y consagración en ambos linajes. Guillermo fue conocido por todos en su pueblecito de Millisle por su honestidad, integridad, misericordia, y su corazón dispuesto a compartir. Quizás es difícil imaginarse que una familia se quedara en un mismo lugar por cien años, pero así fue con los Carmichael. El papá de Amy fue un molinero- moliendo trigo u otros granos elaborando harina como hicieron sus antepasados durante cien años. Había un cimiento piadoso bajo ambos linajes de los padres de Amy. Fueron a las reuniones los domingos, guardaban como santo el día del Señor, y otros principios fueron guardados igualmente. Y, luego vino el avivamiento. Todos y todo estuvieron levantados en nuevas alturas de amor y dedicación. ¡Gloria a Dios por estos tiempos vivificantes y refrescantes de la presencia de Dios! Aunque era pequeño el pueblecito, y se puede decir que la iglesia fue muy insignificante, habían reuniones semanales que animaban más el alma hacia Dios a causa del avivamiento: clases bíblicas entre semana, reuniones evangelísticas los domingos por la tarde, y la reunión de todos los domingos…
FANNY CROSBY UNA VIDA PARA DIOS
UNA VIDA PARA DIOS Frances Jane Crosby conocida generalmente como Fanny Crosby, fue una de las compositoras de himnos más prolíficas de la historia protestante, habiendo escrito más de ocho mil canciones, a pesar de haber quedado ciega a poco de su nacimiento. Durante el transcurso de su vida llegó a ser una de las mujeres más conocidas de Estados Unidos. Hoy en día, la mayoría de los himnarios americanos contienen parte de su trabajo. Algunos de sus himnos más conocidos son Blessed Assurance, Jesus Is Tenderly Calling You Home, Praise Him , y To God be the Glory. Debido a que algunos editores de su época eran reacios a la idea de incluir tantos himnos de una sola persona en sus himnarios, Crosby utilizó casi 100 diversos seudónimos durante su carrera. Vida y carrera tempranas Fanny Crosby nació en Southeast, en el condado de Putnam, New York el 24 de marzo de 1820 en el seno de una familia muy pobre. Sus Padres se llamaban John y Mercy Crosby. Cuando tenía unas seis semanas de edad sufrió una inflamación en sus ojos. Debido a que el médico de la familia no se encontraba, siguieron la recomendación de un vecino quien sugirió a los padres de la niña que le aplicaran unos fomentos. El procedimiento agravó la inflamación quedando como resultado una ceguera permanente. Su padre murió cuando ella tenía solo un año de edad, así que quedó al cuidado de su madre y su abuela. Estas mujeres, devotas creyentes, educaron a Fanny en los principios protestantes. Cuando Fanny creció, pasó a formar parte activa de la Iglesia Metodista Episcopal en la ciudad de Nueva York. A edad de quince años, se enroló en la Escuela para ciegos de Nueva York donde estuvo durante siete años. Allí aprendió a cantar, a tocar el piano y la guitarra. En 1843 fue a Washington donde se sumó a un grupo que hacía lobby para apoyar la educación para los ciegos. Desde 1847 hasta 1858, Crosby se desempeñó como profesora de Inglés e Historia en una escuela en Nueva York. En 1858 se casó con Alexander Van Alstyne, un jóven músico y maestro, también ciego. Tuvieron…
JAN HUS, QUEMADO POR OPONERSE A LA INMORALIDAD DE LA IGLESIA
Jan Hus Quemado por oponerse a la inmoralidad de la iglesia También conocido como Juan Hus o Juan de Husenitz Hus nació de padres campesinos en el sur de la actual República Checa. Para escapar de la pobreza, Hus se preparó para el sacerdocio: «Pensé en convertirme en sacerdote rápidamente para asegurar un buen sustento y una buena vestimenta, y ser considerado por los hombres». Obtuvo una licenciatura, una maestría y finalmente un doctorado. Fue ordenado en 1401 y se convirtió en predicador de la Capilla de Belén de Praga, la iglesia más popular en una de las ciudades más grandes de Europa. Hus pasó gran parte de su tiempo sirviendo en la academia como decano de la facultad de filosofía en Praga. Al vivir en una época de agitación social entre los hablantes alemanes y los ciudadanos checos, Hus se convirtió posteriormente en una figura clave para el nacionalismo checo. Sus puntos de vista acerca de la máxima autoridad de las Escrituras se encendieron cuando comenzó a leer las obras de John Wycliffe (1330-1384). Hus vivió en una época en que la inmoralidad infectó el sacerdocio de la Iglesia católica. Pronto comenzó a predicar «sermones violentos» contra la corrupción del clero hasta que lo denunciaron al arzobispo y le prohibieron predicar. Mientras Hus leía las Escrituras y observaba a los papas de su época abusar de su poder, concluyó que la autoridad papal no era la máxima. Necesitaba una base más sólida que la que se construyó a partir de la opinión de los hombres, sin importar qué tan considerados o eruditos fueran. Él construyó su vida y ministerio sobre la palabra de Dios. Además, argumentó firmemente contra las indulgencias. Estuvo a favor de que tanto el pan como el vino se sirvieran en la comunión, y predicó en el idioma de las personas, en oposición a la idea de predicar en latín con el que se predicaba entonces. La vida de Jan Hus transcurrió entre 1369 y 1415, es decir que murió unos cien años antes de la Reforma de Lutero. Jan Hus fue un doctor en Teología y dotado expositor de la Biblia. Residía en Praga, Checoslovaquia. Fue confesor de…
LA VIDA DE RICHARD BAXTER
Nació el 12 de noviembre de 1615 en Rowton (Shropshire, Inglaterra). Asistió a la escuela gratuita de Donnington (Wroxeter), aunque desarrolló sus conocimientos privadamente de modo autodidacta, alcanzando un alto nivel de erudición. En 1634 conoció a Joseph Symonds y a Walter Cradock, teólogos “noconformistas” -independientes de la iglesia estatal-, de quienes aprendió varias de sus doctrinas y adquirió el gusto por la piedad. Ordenado diácono por el obispo John Thornboroug de Worcester en 1638; director de la Escuela Richard Foley de Dudley en 1639. Maestro adjunto en Bridgnorth (1639-41), aquí se dedicó a estudiar las diferencias entre la Iglesia de Inglaterra y los noconformistas. Rechazó el episcopalismo en su forma inglesa. Su nombre está asociado a la ciudad de Kidderminster (2000 habitantes en aquella época), donde ejerció un notable trabajo pastoral y misionero, entre 1641 y 1660, con algunos intervalos. La población de Kidderminster era ignorante y corrupta. A su llegada escasamente una familia de cada calle asistía a la iglesia, al final de su ministerio, raro era encontrar una familia en cada calle que no lo hiciera. Mientras le fue posible no prestó importancia a las diferencias entre los presbiterianos, los episcopales y los independientes con tal de conseguir la cooperación de los ministros locales en la obra pastoral. Al comienzo de la guerra civil inglesa se unió a las fuerzas parlamentarias como capellán del ejército (l642-45). No muy conforme con las ideas religiosas de Oliver Cromwell, ni con el republicanismo, marchó con el regimiento del coronel Edward Whalley (Ejército Nuevo Modelo, 1645-47). En la restauración monárquica de Carlos II se le ofreció el obispado de Hereford, que B. rechazó por motivos de conciencia y doctrina. Esto le impidió volver a Kidderminster o ejercer como ministro del Evangelio. En 1662, debido al “Acta de Uniformidad” (v. T. Watson), fue expulsado de la Iglesia Anglicana y sufrió persecución a manos del juez Jeffreys, por presunto “libelo contra la Iglesia”. A pesar de ello continuó predicando en distintos lugares de reunión, por lo que fue multado y encarcelado dos veces, una de ellas en la Torre de Londres durante dieciocho meses. Murió el 8 de diciembre de 1691. Baxter escribió constantemente, en total…
LA VIDA DE SAMUEL RUTHERFORD
Rutherford nació hacia el año 1600 cerca de Nisbet, Escocia. No se sabe mucho de su origen. Uno de sus biógrafos menciona que provenía de padres respetables, y otro, que vino de padres humildes pero honestos. Es probable que su progenitor se dedicara a actividades agrícolas y que tuviese un rango respetable en la sociedad, pues pudo dar a su hijo una educación superior. En 1627 obtuvo un «Master of Arts» de la Universidad de Edimburgo, donde fue nombrado Profesor de Humanidades. Poco después fue ordenado pastor de la iglesia en Anwoth, una parroquia rural. Como tenía un verdadero corazón de pastor, trabajaba incesantemente por su rebaño. Se dice que Rutherford estaba «siempre orando, siempre predicando, siempre visitando enfermos, siempre enseñando, siempre escribiendo y estudiando». ¡Por supuesto, esto es posible cuando usted se levanta a las 3:00 cada mañana! Sin embargo, sus primeros años en Anwoth, estuvieron llenos de pruebas y tristezas. A los cinco años de matrimonio, su esposa enfermó y murió un año más tarde. Dos hijos también murieron en este período. No obstante, Dios usó este tiempo de sufrimiento, que preparó a Rutherford para alentar a los afligidos. La predicación de Rutherford era incomparable. Aunque no era buen orador, sus mensajes causaban gran impacto. Un comerciante inglés dijo de él: «Yo vine a Irvine, y oí a un bien dotado anciano de larga barba (Dickson), que me mostró el estado de mi corazón. Luego fui a St. Andrews, donde oí a un hombre dulce de majestuosa mirada (Blair), que me mostró la majestad de Dios. Después de él oí a un pequeño hombre justo (Rutherford), y él me mostró el encanto de Cristo». En 1636 Rutherford publicó « Apología de la Gracia Divina», un libro en defensa de las doctrinas de la gracia. Esto lo puso en conflicto con las autoridades de la Iglesia que eran dominadas por el Episcopado inglés. Fue llamado ante la Alta Corte, privado de su oficio ministerial y desterrado a la ciudad de Aberdeen. Este exilio fue una penosa condena para el querido pastor. Era insufrible para él estar separado de su congregación. Sin embargo, aunque era severa e injusta la sentencia, no lo descorazonó.…
LA VIDA DE SHIMETA NEESIMA
Los marineros miraron con sospecha y cautela cuando el hombre abordó el barco. Las dos espadas letales sujetadas con correas a sus espaldas y su apariencia aristócrata los alertó que no se trataba de un ordinario marinero de cubierta. ¡Tenían razón! Huyendo del Japón durante los años en que el cristianismo era proscrito, Shimeta Neesima arriesgó su vida en busca del Dios de la Biblia. Habiendo leído secretamente el libro prohibido en una biblioteca, el joven dejó su patria con nada más que su ropa y sus espadas que le identificaban como un samurai. Trabajando como marinero de cubierta para pagar su pasaje, desembarcó en Boston y se hizo amigo de un mercader que le guió a la fe en Jesucristo y pagó su educación. A Shimeta lo ordenaron como ministro cristiano y regresó a su tierra natal con la visión de introducir la educación cristiana en el Japón. Inicialmente estableció una escuela con siete estudiantes en dos pequeños cuartos, y la llamó Escuela de Doshisha (Un propósito). El rápido crecimiento permitió que la escuela se expandiera hasta formar una universidad, con el único propósito de capacitar a los cristianos para el liderazgo en la sociedad japonesa, en profesiones como: editores, médicos, abogados, hombres de negocios, ministros del evangelio, a pesar de una intensa resistencia de parte de las autoridades locales. Consumido por su visión para Japón, Shimeta pidió unos pinceles en su lecho de muerte. Con el mapa de Japón ante él empezó a subrayar los lugares que creía estratégicos para la evangelización del país. Manejando pinceles en vez de espadas y sirviendo a Jesucristo y no a un jefe militar, este antiguo Samurai usó su último aliento para trazar el bosquejo de misiones para expandir el evangelio en Japón».
REV. ALBERTO BENJAMÍN SIMPSON
Alberto Benjamín Simpson nació en la Isla Prince Edward (Canadá) el 15 de Diciembre de 1843. Fue dedicado al Señor mediante las oraciones de John Geddie, el pastor de la familia, quien fuera él mismo, más tarde, un gran misionero conocido por su labor en las islas Nuevas Hébridas, en el Pacífico Sur. En 1847, la familia Simpson se trasladó a la provincia de Ontario, donde adquirieron una granja. Allí, Alberto recibió la influencia espiritual de la estricta tradición calvinista y puritana de la Iglesia Presbiteriana Escocesa, influencia que fue balanceada por la lectura de la obra de Walter Marshall acerca del Misterio Evangélico de la Salvación, la que llevó a este joven de 15 años a comprender los conceptos de salvación y de santificación cristianos. Al terminar sus estudios escolares, hizo clases durante un tiempo, con el fin de reunir el dinero necesario para poder matricularse en el Colegio Knox de la Universidad de Toronto, graduandose a los 21 años, luego de lo cual fue recibido como pastor de la Iglesia Presbiteriana de Knox, en Hamilton, Ontario. Después de ocho años de ministerio exitoso y de haber ganado 750 nuevos miembros para su iglesia, se decía de él que era mejor que ningún otro en cuanto a elocuencia, habilidad y éxito en su labor ministerial. (A. E. Thompson, A. B. Simpson, His Life and Work, Christian Publications.) A la edad de 32 años, en Diciembre de 1875, Simpson fue llamado a ocupar el púlpito de la mayor iglesia presbiteriana de Louisville, Kentucky, la iglesia presbiteriana de la calle Chestnut. Allí se embarcó en un esfuerzo evangelístico a nivel de toda la ciudad, que le sirvió para apreciar la trascendencia del ministerio evangelístico. Al cabo de cinco años allí, su atención fue atraída por las masas de inmigrantes recién llegados a la ciudad de Nueva York, fundando una misión junto a las puertas de la Iglesia Presbiteriana de la calle Trece, donde, después da haber llevado hasta el Señor una cantidad de más o menos 100 inmigrantes italianos, la congregación le sugirió que buscara otra parte para proseguir este ministerio. En consecuencia, Simpson, dandose cuenta que Dios lo llamaba a un «ministerio…
“…QUE LO HAGA POR LA FORTALEZA QUE DIOS DA…”
El que habla, que hable conforme a las palabras de Dios; el que sirve, que lo haga por la fortaleza que Dios da, para que en todo Dios sea glorificado mediante Jesucristo, a quien pertenecen la gloria y el dominio por los siglos de los siglos. Amén. (1 Pedro 4:11) Guillermo Wilberforce se crió en una familia privilegiada y estudió en la Universidad de Cambridge. Dos semanas después de cumplir veintiún años, fue elegido diputado al Parlamento británico, donde destacó como brillante orador y político. Más tarde conoció a John Newton, el autor del conocido himno Sublime Gracia. Éste había sido capitán de un barco que traficaba esclavos hasta que tuvo un encuentro con Jesucristo; ahí se arrepintió de su vieja vida y se hizo ministro del evangelio. Cuando Wilberforce conoció a Newton, la semilla destinada a cambiar la historia quedó sembrada en su corazón. En 1787, el político comenzó una campaña para concientizar a Gran Bretaña de las atrocidades de la esclavitud y votar a favor de su abolición. Fue una batalla encarnizada, pues tuvo que enfrentarse no sólo a políticos y empresarios, sino también a los mismos líderes religiosos, quienes igualmente tenían sus esclavos. Desde el lecho de muerte, Juan Wesley le escribió a Wilberforce: “Si Dios está contigo, ¿quién será contra ti? ¿Son todos ellos más fuertes que Dios? ¡No te canses de hacer el bien! Sigue adelante, en el Nombre de Dios y en el poder de su fortaleza, hasta que la esclavitud quede totalmente aniquilada, aun en los Estados Unidos (la más vil jamás vista en la tierra).” Wilberforce perseveró, porque sabía bien lo que estaba en juego: la vida de millones de personas. Por fin, el 23 de febrero de 1807, se aprobó en el Parlamento británico la Ley de Abolición de la Esclavitud, con 283 votos a favor y 16 en contra. Veintitrés años después, hacia el final de la vida de Wilberforce, la esclavitud fue abolida en todo el imperio británico. Y poco más tarde sucedió lo mismo en los Estados Unidos. Esos cambios tuvieron lugar gracias a que un hombre decidió vivir según el principio de “…servíos por amor los unos a los otros” (Gálatas 5:13). Fuente: Ministerio de Literatura Voz Que Clama.
LA VIDA EN EL HOGAR DE LOS WESLEY
Juan y Carlos Wesley ¿Qué cristiano no conoce estos nombres? Durante las primeras décadas del siglo XVIII, Inglaterra estaba muy abatida espiritualmente. De hecho, estaba en uno de sus estadios más bajos. Pecado del tipo más feo abundaba en cada nivel de la sociedad, y parecía que no había esperanza que la Iglesia pudiera despertar y parar su deslizamiento hacia la iniquidad. Sin embargo, igual como Dios proveyó a Ana en los días de Israel, así hubo una «señora elegida» en Epworth, Inglaterra, llamada Susana Wesley, quien se preocupó por sus hijos. Sin saberlo ella, Dios le guió a criar a un profeta y a un salmista, los que juntos despertarían a la nación, y además, al mundo entero. Eso sucedió hace trescientos años y todavía sus voces claman en el cristianismo del siglo XXI. ¿Qué predicador no ha usado un dicho o un ejemplo de la vida de Juan Wesley? ¿Qué asamblea de cristianos no ha cantado uno de los himnos de Carlos? El impacto de las vidas de estos dos hombres es inmedible. Es claro que Dios en su previo conocimiento iba guiando y velando sobre el entrenamiento de ellos. Meditando sobre la herencia de estos dos hombres, mi corazón se aferra a una de las promesas de Dios, tocante a nuestros hijos. Se encuentra la misma en Isaías 59:21, y fue escrita en el contexto del adversario, el que ataca la piedad. Es una promesa a los que dejaran atrás al pecado. «El Espíritu mío que está sobre ti, y mis palabras que puse en tu boca, no faltarán de tu boca, ni de la boca de tus hijos, ni de la boca de los hijos de tus hijos, dijo Jehová, desde ahora y para siempre.» ¡Qué hermoso modo de pelear contra los enemigos de nuestro Dios! Tres generaciones de gente que no pondrían a un lado las verdades de Dios. ¡Qué nosotros también nos aferremos al poder de esta estrategia! Queda claro que el diablo lo entiende, y que pelea con todas sus fuerzas para detenerlo. Estudiando las genealogías de las dos ascendencias, de Juan y Carlos, encontramos un carácter noble en las dos. Ambos linajes tuvieron personas que…
BIOGRAFÍA DE DAVID LIVINGSTONE
Misionero y Explorador del Continente Negro 1813 – 1873 Como misionero y como explorador, el nombre de David Livingstone es uno de los más ilustres en la historia del mundo. Nació en Blantyre, cerca de Glasgow, el 19 de marzo de 1813. Desde niño reveló un genio y una habilidad notable, y su energía lo ayudaba a vencer todos los obstáculos que hallaba. En su casa aprendió la honestidad y la rectitud que con el ejemplo y la palabra le enseñó su piadosa madre. Siendo sus padres pobres, no pudieron darle una instrucción como hubieran deseado, y así lo hallamos ya a la edad de diez años trabajando catorce horas diarias en una fábrica de tejidos de algodón. Pero el ruido ensordecedor de las máquinas y de las correas, y la fatiga de una jornada tan larga, no le impedían proseguir asiduamente sus estudios, iniciándose sin la ayuda del maestro en los misterios del latín, de la botánica, y de varias ciencias más. Su buena madre tenía que hacerle presente que era la hora de dormir, pues con frecuencia a media noche lo encontraba encima de sus libros y apuntes. Joven era cuando quedó convencido de la necesidad de la regeneración, pero fue sólo a los veinte años cuando aceptó a Cristo como su Salvador personal. Su conversión creó en él nuevos sentimientos y nuevas disposiciones. El mismo da su testimonio escribiendo estas palabras: “El don gratuito de Dios produjo en mí sentimiento de gran amor a Aquel que nos ha rescatado con su sangre, y de profunda gratitud hacia Él. Su misericordia ejerció influencia en mi vida entera”. Este fue el origen del hombre que más debía influir en abrir las puertas del continente negro, y quien por su amor a las almas, su indómita voluntad, sus perseverantes esfuerzos y su tenacidad nunca superada, iba a llegar a regiones que nunca habían sido pisadas por el pie de un hombre blanco. Livingstone aprendió pronto a renunciar a todo por amor a Cristo. Consagraba todas sus economías a la obra misionera, privándose aún de las cosas necesarias para que sus contribuciones fuesen más abundantes. Pero no sólo quiso dar su dinero a…